ROVIRA, Walter (Mendoza, Argentina, 1923 – Girona, 2012). Lote 33008308
ROVIRA, Walter (Mendoza, Argentina, 1923 – Girona, 2012).
“Mujer”.
Oro macizo de 18k.
Firmado.
Medidas: 12 x 10 x 6 cm. Peso: 450 g.
Walter Rovira nació en seno de una familiar de larga tradición cultural e intelectual catalana, inscrita en la Corte de Aragón desde el año 1400. Su abuelo Pau fue crítico de arte en el periódico francés “Le Figaro”, y su padre Rafael fue delegado del periodismo argentino y fundador del Colegio de Periodistas. En este ambiente, Walter Rovira inició sus estudios en la Escuela de Bellas Artes de Paraná (Argentina), a la edad de nueve años, y desde entonces continuará dibujando, pintando y esculpiendo hasta su muerte, desarrollando una carrera de más de cuarenta años de dedicación exclusiva a la creación artística, y consolidando un dominio absoluto de la técnica.
Optó por un lenguaje de raíz clásica, principalmente centrado en la figura humana, que para el artista representa a la naturaleza. Uno de sus grandes temas es la danza, porque en ella están representados todos los movimientos del cuerpo. También realizó paisajes, llegando a trabajar todas las disciplinas: dibujo, grabado, óleo, acrílico…
En su obra escultórica, Walter Rovira experimenta también con todos los materiales, trabajando la escayola, el barro, la cerámica, el hierro, el bronce, la plata y el oro, así como la talla directa en madera, mármol y granito. En 1975 se instaló en Barcelona, y en 1976 se trasladó a Francia, donde permanecerá el resto de su vida, para finalmente pasar sus últimos días en Girona.
A lo largo de su carrera celebró numerosas exposiciones, destacando especialmente las celebradas en la galería Wildenstein de Buenos Aires (1952), la Casa de Mendoza en la misma ciudad (1962), la Sixty One Tempra Gallery de Londres (1976), el Círculo de Arte de Barcelona (1976), la galería Selearte de Milán (1977), la Riba de Barcelona (1977), la Covarsi de Arenys de Mar (1977), la Arpe de Cannes (1980), la Acqualeria de Eygalières (1983, 1984), la Françoise Aillaud Serre de Cornillon (1986) y la Guignè de París (1991). Asimismo, participó en ferias como la Artexpo de Barcelona (1976).
En los últimos veinte años de su vida, Walter Rovira se retiró del panorama expositivo, acumulando su obra sin sacarla a la venta más que de forma esporádica, vendiendo sólo a particulares. De este modo llegará a guardar cerca de mil cuadros, y unas cuarenta y cinco esculturas originales.
Actualmente está representado en la Universidad de México, el Ayuntamiento de Brullà (Francia) y el Museo de la Escuela de Bellas Artes de Paraná, así como en diversas colecciones particulares de Alemania, Japón, Reino Unido, Italia, España, Venezuela, Argentina y Francia. También son de su mano las pinturas murales conservadas en la iglesia de San Juan Bautista de Buenos Aires y en el puerto de Necochea (Buenos Aires).