Clásicos del diseño en el contexto contemporáneo
¿Qué palabras podrían definir el diseño? Belleza, ergonomía, funcionalidad, sencillez… Un buen diseño es más complejo que un objeto funcional, y su definición es más amplia que de un objeto meramente estético. Es tan multifacético, flexible, dinámico y profundo como es la vida diaria de un hombre moderno.
El concepto que teníamos del hogar ha sido transformándose, sobre todo, en los últimos dos años. Las casas han pasado de un lugar de descanso después de una intensa jornada laboral a convertirse en un espacio multifuncional, desde el que interactuamos con el mundo exterior y viceversa. Asimismo, esta nueva forma de habitar y disfrutar una vivienda redefine los criterios que debe cumplir una pieza de mobiliario.
Debido a diferentes factores, la tendencia general del mercado del diseño actual vuelve a fijar su atención en los valores propios del diseño de los mediados del siglo XX apostando por una gran calidad, durabilidad del objeto, funcionalidad, sencillez y estética. En definitiva, el uso de los objetos cotidianos, se ha convertido en un acto casi performativo y de goce. Además, otra tendencia evidente, que afecta en primer lugar nuestra forma actual de comprar, es el giro hacia el “slow living”, puesto de moda al principio de los años dos mil. El principal enfoque de este modo de vivir, es el consumo consciente, en el que cada paso del proceso de la búsqueda se debe disfrutar, y cada pieza encontrada debe tener su historia individual, para finalmente terminar habitando un hogar y hacerlo confortable.