Antoni Tàpies, Dau al Set y el influjo surrealista
Antoni Tapies protagoniza nuestra subasta del próximo día 16 de noviembre con uno de los inconfundibles dibujos que realizó durante su adscripción al icónico grupo vanguardista, Dau al Set. Las escasas ocasiones en las que la vertiente más surrealista de Tàpies irrumpe en el mercado del arte, convierten las obras de esta etapa en una de las más apreciadas y buscadas del artista en el sector.
Posiblemente, Antoni Tapies sea uno de los artistas contemporáneos más estudiados y admirados de nuestra historiografía, alcanzando el reconocimiento unánime como figura esencial en el desarrollo y evolución de las vanguardias artísticas en España.
Con una de las trayectorias creativas más ricas e influyentes del arte del siglo XX, Tàpies forjó su obra bajo el signo de un acérrimo compromiso político y social, donde el verdadero arte, como él mismo afirmó, “debe aspirar a cambiar el mundo”.
Corrían los años cuarenta cuando en una España sometida por el régimen franquista, se produjo una radical reacción respaldada bajo la órbita surrealista en contra del arte conservador que imperaba por aquel entonces. El surrealismo, que como último movimiento de las vanguardias anterior a la guerra civil, se erigió en un poderoso símbolo de libertad y transgresión, se extendió a partir de los años 30 entre las minorías inquietas de Barcelona, gracias, no solo a la influencia que el movimiento había tenido en toda Europa, sino también gracias a los grandes referentes que constituyeron figuras como Salvador Dalí y Joan Miró.
De este contexto nace en 1948 el germen del grupo Dau al Set donde Tapies, junto a Modest Cuixart, Joan Ponç, J. J. Tharrats, el poeta Joan Brossa –verdadero inspirador de su estética– y Arnau Puig, sentaron las bases del carácter subversivo que de forma crucial marcó su identidad.
El prestigio que ha tenido y sigue teniendo ‘Dau al Set’ se debe, además de a la altura de sus representantes, al revulsivo que supuso para la escena artística española. Por otra parte, es indudable también, que la notoriedad alcanzada por Antoni Tàpies ha contribuido significativamente al reconocimiento unánime del grupo.
Como hemos apuntado anteriormente este determinante periodo en la trayectoria de Tàpies estará marcado por una obra que, como la que aquí nos ocupa, estará dominada por un figurativismo magicista de raigambre surrealista vinculada a la literatura del inconsciente. La magnifica tinta sobre papel que os presentamos, pone de manifiesto todos los elementos que definieron la producción dausatiana de Tàpies, así como la influencia determinante que ejerció la obra de Paul Klee y Max Ernst en paisajes oníricos y fantásticos que como este, poblará con multitud de objetos, criaturas y símbolos llenos de sugerentes ecos herméticos que anticipan ya la carga mística que caracterizará la pintura de Tàpies.