Por qué los coleccionistas aman Lafite
Château Lafite Rothschild es sin duda uno de los vinos más prestigiosos y coleccionables del mundo.
Tiene una historia rica y fascinante. La primera referencia se remonta a 1234. El nombre “Lafite” deriva del término histórico “fite”, que significa “colina”, y describe su meseta, que es uno de los puntos más altos de la denominación.
A principios del siglo XVIII, el vino de Lafite se vendía en Londres, donde se informó que era uno de los favoritos del primer ministro, Robert Walpole y se hizo conocido como el ‘Vino del rey’, después de ser presentado a la corte de Versalles por el mariscal Richelieu.
El primero de los “premiers crus classé”
En Burdeos no hay vinos más grandes que los cinco castillos a los que se hace referencia como “premierscrus”: ChâteauLafite-Rothschild, Château Latour, ChâteauMargaux, ChâteauHaut- Brion y Château Mouton Rothschild.
El “premier cruclassé” es el nivel superior de la clasificación de Burdeos, una lista que se elaboró bajo las instrucciones de Napoleón III en 1855. Entonces, los productores de vino se clasificaron según la reputación de un castillo y el precio comercial que, en ese momento, estaba directamente relacionado con la calidad.
Es importante destacar que Lafite, en la clasificación de los GrandsCrusClasséque se realizó en 1855 para la Exposición Universal de París, ocupó el primer puesto.
Lafite se puede considerar, quizás, el vino con la mejor reputación por su calidad y longevidad con precios lógicamente altos y está considerado por algunos expertos como el mejor vino de Burdeos.
Notas de sabor.
En cuanto a la Denominación de Origen Burdeos, los vinos de Pauillac son versiones clásicas caracterizadas por sabores y aromas intensos de grosella negra que se convierten en mina de lápiz, cedro y caja de puros con la edad. Estos vinos tienen una acidez vibrante y una estructura tánica firme que les permite envejecer con gracia durante muchas décadas en las buenas cosechas.
Puedo asegurarles que entre estos vinos de Pauillac, Lafite siempre ha tenido un encanto particular. Sin duda, es uno de los mejores vinos de Burdeos.
Para el poder hay otros castillos, pero para la elegancia y la delicadeza, Lafite es el vino ganador.