Roberto Fabelo en Setdart.
Es uno de los artistas puntales de la esfera contemporánea cubana, y a pesar de la vastedad iconográfica que despliega su imaginación, cuando contemplamos cualquiera de sus obras se manifiesta siempre un pálpito mágico que sólo él es capaz de convocar.
Hablamos de Roberto Fabelo, pintor y escultor cuya obra ha ido granjeándose con un merecido reconocimiento en las últimas décadas, además de elevadas cotizaciones. En las subastas Christie’s, por ejemplo, una obra sobre seda muy similar en tema y tratamiento a varias de las que se están subastando estos días en Setdart, alcanzó la cifra récord de 437.500 USD (concretamente, el título “Viaje al jardín fantástico, de 2016). También “El jardín fantástico” de 2006 se remató en Christie’s por 271.060 €, siendo ésta una pintura de características similares a “De madrugada al Rocío”, un óleo de 2009 actualmente en Setdart Subastas (véase lote 35011322).
Las importantes obras del artista que Setdart reúne ejemplifican distintas facetas de la creación de Fabelo, autor de una subyugante cosmovisión. Asimismo, dejan constancia de la variedad de lenguajes y técnicas en los que trabaja, siendo los materiales empleados, en sí mismos, conductores de sentido: los casquillos de bala que conforman sus impresionantes “Mundos” ingrávidos, con los que denuncia la violencia que arraiga en la médula civilizatoria (véase lote 35232558); los bronces alegóricos (“Animalia” 35216981), las misteriosas mujeres al óleo o dibujadas sobre papel de seda, fundiéndose cada cuerpo femenino mediante creativas simbiosis con pájaros (35216979), con insectos alados (35216977), peces (35216978) y moluscos (35216980).
Contemplando estas pinturas cargadas de lirismo, que nos adentran por territorios de rica cadencia onírica, descubrimos que la mujer opera como una suerte de médium entre mundos dispares, pues llega a trascender todas las fronteras: la del sueño y la vigilia, pero también las que separan las especies, de modo que como mujer-pájaro, como sirena o caballito de mar, atraviesa todas las esferas, las de lo micro y lo macro, aunando el estrato subterráneo, el oceánico, la tierra y el aire.
Tampoco falta el humor en sus cuadros, aunque a menudo aparezca soterrado bajo capas de lectura. Es el caso del citado óleo “De madrugada al rocío” (35011322), en el que una niña y su hermano cabalgan un enorme gallo. Para Fabelo, este animal simboliza la hombría, lo que lleva al artista a ironizar en sus cuadros sobre la idea de “macho”, asociado en la cultura popular con la valentía. Cuando muestra a féminas cabalgándolos, transgrede el mito del macho, domeñando con ironía el viejo estereotipo.
Se aprecia la herencia del realismo mágico en la plástica de Fabelo, que vertebra el legado literario latinoamericano, pero el artista cubano también explora la tradición europea en sus corrientes surrealistas y expresionistas. Sin embargo, lo cierto es que su obra es inclasificable, como la de todo gran artista, pues en esencia su imaginario fragua a partir de sus propios deseos y reivindicaciones, de sus miedos y de sus esperanzas.
ROBERTO FABELO (Camagüey, Cuba, 1950) estudió en la Escuela Nacional de Arte y en el Instituto Superior de Arte de La Habana. A lo largo de su carrera como artista, ha sido galardonado con numerosos premios por su arte, incluyendo el Medallón de Cultura Nacional (Cuba), el Medallón de Alejo Carpentier, el primer lugar en el 11 International Biennial de Dibujo en el Reino Unido, el primer lugar en la Primer Bienal Iberoamericana de la Acuarela en Viña del Mar, Chile y un premio de la UNESCO por la promoción de Bellas Artes. En 1984 Fabelo fue reconocido en el primer Biennial de La Habana. Su obra se ha mostrado en más de 40 exhibiciones individuales y en más de 500 exhibiciones colectivas en países tales como Suiza, Japón, Estados Unidos, México, Venezuela, Colombia, Panamá, Argentina, Chile, Brasil, Costa Rica, y Ecuador. La obra que se presenta continúa el estilo propio de Fabelo, basado en un humor absurdo a la vez que reivindicativo. La obra está en consonancia con “Viaje Fantástico” (2012), en el cual se presenta una mujer montada en una gallina. Para Fabelo, expresionismo y surrealismo se fusionan en su obra, inspirándose en la realidad y en la fantasía para configurar obras de gran carga expresiva.Hoy en día su obra se encuentra dividad entre importantes colección de carácter particular, y también en lugares de gran interés artístico cultural ejemplo de ellos es el Museo de la Habana o la Fundación Casa Cortes en Puerto Rico, entre muchas otras.