GONZALO BILBAO MARTÍNEZ . “Desnudo”.
En esta pintura de Gonzalo Bilbao, una joven recostada en un sofá tapizado con elegantes brocados, adopta una actitud espontánea, como si su descanso hubiera sido súbitamente interrumpido por la intromisión del espectador: confronta nuestra mirada mientras que su cuerpo desnudo permanece aún parcialmente girado.
Sin pudor y con plena naturalidad, sus brillantes ojos oscuros nos miran pero al mismo tiempo nos ignoran, como atravesándonos en su languidez. Con su mano derecha, la muchacha juguetea con un collar de coral cuya textura rojiza acentúa por contraste la blanquecina tersura de la piel.
Suaves curvas definen una anatomía proporcionada y sensual, a lo que contribuye la sedosa melena negra que cae en cascadas por un costado del cojín. También los diseños florales de los almohadones, y su ligero tornasolado absorbiendo la luz dorada, armonizan con la delicadeza plástica del conjunto.
Gonzalo Bilbao (Sevilla, 1860 – Madrid, 1938) se inicia en el dibujo desde niño y en 1880 inicia su carrera pictórica. Por estos años realiza un viaje a Italia y Francia junto a Jiménez de Aranda. En Roma trabajó junto al pintor José Villegas Cordero, y viajó por las diferentes capitales italianas, pintando vistas urbanas y rurales hasta su regreso a España en 1884. En los años siguientes visitará de nuevo Roma, viajará por España y también marchará a Marruecos, París y Munich. En España ejerció como profesor de pintura, al principio como particular y, desde 1903, como sucesor de Jiménez de Aranda en la Real Academia de Bellas Artes de Santa Isabel de Hungría de Sevilla. En 1904 contrae matrimonio y fija su residencia en Madrid, donde continuó con su labor pedagógica en la Academia de San Fernando. Durante su carrera concurrió a numerosas exposiciones de bellas artes, tanto nacionales como extranjeras, siendo premiado con tercera medalla en la Exposición Universal de París (1889) y la Internacional de Barcelona (1891), medalla única en la Universal de Chicago (1893), y con medalla de oro en las Internacionales de Berlín (1899), Munich (1905), Buenos Aires (1910), Santiago de Chile (1910), San Francisco (1915) y Panamá (1916). Participó asimismo en las Nacionales de Bellas Artes, obteniendo segunda medalla en 1887 y 1892, primera en 1899 y 1901 y de honor en 1915. Pintor castizo, representante del costumbrismo español, expresó en sus cuadros estampas coloristas de la vida andaluza y de sus personajes más populares, y practicó además el paisaje, la figura y el retrato, pintando a personajes destacados de la época como el rey Alfonso XIII y la actriz Carmen Díaz. La luz y la vitalidad de sus composiciones acercan su lenguaje a la estética impresionista, centrándose en la representación esencial de ambientes y paisajes. Gonzalo Bilbao está representado en el Museo de Bellas Artes de Sevilla, donde cuenta con una sala dedicada enteramente a su obra, el Museo del Prado, el Jaume Morera en Lleida y el de Bellas Artes de Córdoba, entre otros, así como en colecciones particulares tanto españolas como internacionales.